Del 7 al 13 de abril, en Múnich, fuimos testigos de un momento histórico en el stand de Caterpillar durante la edición 2025 de Bauma, la feria de maquinaria más importante del mundo. La marca celebró su centenario con una exposición inolvidable que combinó legado, tecnología y una clara visión hacia el futuro.


Uno de los protagonistas del stand fue nada menos que el legendario Caterpillar Sixty, uno de los primeros bulldozers fabricados por la marca allá por 1925. Con su característico color original y el antiguo logo que dio origen al nombre «Caterpillar» (en inglés, «oruga»), esta joya fue cedida especialmente para la ocasión por el prestigioso Ebianum Excavator Museum de Suiza. Se estima que se produjeron unas 19.000 unidades de este modelo, y su presencia en Bauma fue como abrir una ventana al nacimiento de la maquinaria pesada moderna.

Legado y futuro
Pero la historia no quedó en el pasado. Justo al lado del Sixty, la marca mostró cómo ha evolucionado en un siglo de innovación. Allí brilló el nuevo Caterpillar D6 XE – Edición Especial 100 Años, pintado en un elegante tono Centennial Gray, creado especialmente para esta celebración. Esta edición conmemorativa también estará disponible próximamente en excavadoras, motoniveladoras y otras máquinas, algunas de las cuales llegarán a nuestra región en el corto plazo.


El D6 XE representa lo mejor del presente con una mirada responsable hacia el futuro. Cuenta con tecnología Electric Drive, lo que significa que reemplaza el convertidor de torque y la transmisión tradicional por dos motores eléctricos alimentados por un motor diésel. Esto permite un ahorro de combustible de hasta el 30%, gracias a esta configuración híbrida que combina potencia con eficiencia energética.

Además este equipo también es HVO Ready. Es decir, su motor diésel está preparado para funcionar con HVO (aceite vegetal hidrotratado), un combustible renovable de alta calidad que puede mezclarse con diésel fósil o usarse de forma pura, sin necesidad de hacer ninguna modificación al motor. Esta tecnología permite una notable reducción en las emisiones de CO₂ y es una de las grandes apuestas de Caterpillar para una transición energética más limpia.

La mayoría de los equipos que la marca exhibió en Bauma 2025 ya están preparados para recibir este tipo de combustibles alternativos, dejando en claro que la sostenibilidad también juega un papel clave en el futuro de la maquinaria pesada.
En definitiva, el stand de Caterpillar fue una verdadera experiencia: un homenaje a sus raíces y una muestra contundente de su liderazgo tecnológico. Un siglo de historia resumido en una exhibición que dejó claro que la marca sigue apostando con fuerza al futuro de la maquinaria pesada.